sábado, 27 de octubre de 2012

TESTIMONIO DE UN EX-NARCO SICARIO MEXICANO IV


 Parte IV
Yo no sabía qué hacer, porque las cuentas bancarias bajaban. Pero llegó el momento que me ofrecieron un negocio, el negocio que es el mejor pagado en el mundo de la mafia, el negocio del secuestro.
Yo cometí 42 secuestros.
Dios bendiga a las madres que tienen sus hijos, y Dios tenga misericordia de aquellas que nos los tienen.
Secuestré a niños. Esos niños, después de estar secuestrados, eran llevados a un lugar de Centroamérica, en Guatemala; ahí, a esos niños los acostaban en una plancha de piedra, y se hacían ritos satánicos con ellos.
Yo era tercer sacerdote sacrificatorio satanista, de una secta. Con un cuchillo especial yo partía vivos a los niños; desde el pescuezo hasta el ombligo. Después de haberlos sacrificado vivos, se les sacaban los órganos. Los órganos que sobraban se enviaban para hospitales clandestinos centroamericanos.
El corazón y la sangre se ofrendaban a satanás. El corazón de los niños era comido por los sacerdotes principales, y el sacerdote sacrifactorio.
NIÑOS SACRIFICADOS
Después que empezamos a hacer esto, 42 niños fueron sacrificados a satanás; yo empecé a sentir más poder. Pero había algo dentro de mí, entre mi lucidez, que decía: “¿Será que algún día no podré estar tranquilo en un lado? ¿Será que algún día pueda ser un hombre nuevo, un hombre bueno?”.
Pero nuevamente me asaltaban a mí los pensamientos inmundos, pero nunca pensé que ese día llegaría. Para mí estaba lejos, distante. Para mí era dificil creer que yo fuera salvo.
Y para mucha gente en la actualidad, es dificil creer que yo haya sido salvo, que Dios me haya perdonado, después de trantas atrocidades que cometí. Pero déjeme decirle que para Dios no hay imposibles.Yo cometi 60 homicidios. Yo torturaba a mis víctimas, antes de quitarles la vida; yo gozaba con las torturas.
Cometí 17 asaltos bancarios en la Ciudad de Mé- xico, trafiqué con armas, con droga; fui uno de los peores drogadictos y alcohólicos que pudo haber existido.
Intenté asesinar a mis padres, a mi esposa, a mis hijos. Pero déjeme decirle que ya Dios tenía un plan para mi vida. Ya Dios había puesto, en una hoja especial, mi nombre, donde Él me iba a rescatar.
Como no pude seguir sirviéndole a satanás, porque había cometido errores grandes, empezó nuevamente a dejarme sin dinero.
Cuando yo me fui a la Ciudad de México, para irme de ahí a Estados unidos, ahí en el aeropuerto de México fui tomado preso, y llevado a la cárcel.

CÁRCEL: 226 AÑOS

Se me juntaron varios delitos, por los cuales había un proceso. Se me juntaron siete delitos, de los cuales, cuando llegó la sentencia, por cada delito eran 38 años. Pero para Dios no fue imposible sacarme de la cárcel, y quitarme esa sentencia. Porque al poco tiempo yo salí de la cárcel.
Y yo decía: “Cómo es posible que después de haber estado en la cárcel, de haberme sentenciado, yo salgo libre; en menos de lo que canta un gallo”.  No lo comprendía.  Mi esposa clamaba a Jesús constantemenete, porque déjeme decirle que yo ya me había casado. Mi esposa, de origen judío, clamaba a Dios. Yo golpeaba a mi esposa constantemente, más cuando me hablaba de Jesús. Ella no soportaba ver que yo me drogara.
Cada vez que golpeada a mi esposa, su mamá le decía, y sus vecinos también: “Métalo a la cárcel; déjelo. ¡Mátelo!”.
Pero ella decía: “No, yo sé que hay un Cristo que vive y que lo va a cambiar”.
Cuando salí de Almoloya de Juárez, fue algo impresionante, porque a mí se me quitó cierta cantidad de dinero para poder salir de ahí.  Se me quitó una cuenta bancaria de mil millones de pesos (en dólares), cuatro residencias valuadas en 50 millones de dólares, 320 vehículos, 220 toneladas de cocaína, y 210 toneladas de armamento.
Y todo ese dinero quedó en el Gobierno, con el procurador, porque él fue el que me propuso la libertad, si yo le entregaba todo. Lo más grandioso que me pasó en la cárcel, fue que cuando llegué, Dios me tenía preparado algo especial. En la cárcel, arriba de un poste hay una bocina que gritan y dicen que va entrando  o mengano.
“EN DIABLO” EN PRISIÓN
A mí me apodaban “El Diablo”. Entonces, el de la bocina gritó: “Va entrando el diablo...”. Y cuando entré, a la primera puerta se me acercó un enanito; un hombre de 1.20 de estatura.
—Sí, yo soy.
—Déjame decirte que Cristo te ama.
Y yo decía: “Cómo es posible que hasta adentro de la cárcel hayan aleluyas”.
Y le dije:
—¡Quítate de aquí, enano!
Ese hombre se convirtió en mi sombra dentro de la cárcel, pues cuando iba al baño, me tocaba la puerta y me preguntaba:—¿Estás ahí?
 Y yo le decía: —Sí, estoy aquí. Y él repetía: —Cristo te ama.
Continuará… PARTE V
Fuente revista Centinela julio /12  (disponible solo en PDF)

jueves, 25 de octubre de 2012

TESTIMONIO EX-NARCO SICARIO MEXICANO III parte


III PARTE
Posadas Ocampo recibía 500 millones de pesos cada seis meses, por tres bandas de narcotraficantes. Porque él sabía la ubicación de los laboratorios clandestinos de heroína, cocaína y de morfina.Y la banda decidió liquidarlo.
MUERTE A RUIZ MASSIEU
Posteriormente, en la Ciudad de México, se me ordenó darle muerte a un procurador de Justicia: A José Francisco Ruiz Massieu, ex-Procurador de México, y ex cuñado de los Salinas de Gortari. Ellos habían pagado un buen dinero para liquidarlo, porque Ruiz Massieu estaba descubriendo las anomalías de los Salinas de Gortari.
Y también, ya no quiso seguir en el negocio. Por eso se le liquidó.
El diputado Manuel Muñoz Rocha también fue ejecutado por orden de Salinas de Gortari.
El esqueleto que se encontró en la finca “El Encanto”, no es el de Muñoz Rocha, pues él quedó en un pilar de protección, y con muchas toneladas de cemento.
Posteriormente, había alguien que estaba estorbando los planes de Salinas. Salinas era el primer sacerdote satanista en el país de México, pero también era alguien que quería tener el poderío de País. ¿Por qué? Porque él le sirve en la actualidad a satanás.
Cuando Luis Donaldo Colosio surgió como nuevo candidato a la Presidencia, él empezó a hablar cosas conforme a La Escritura de Dios.
LUIS D. COLOSIO, CRISTIANO
¿Por qué motivo? Porque Colosio era un candidato a la Presidencia, pero él era cristiano pentecostés. Luis Donado se convirtió a Cristo en una campaña en el Estado de Chihuahua.
Salinas llamó a Colosio,
a la casa de Los Pinos, para ubicarlo sobre qué es lo que debía de hacer cuando llegara a la Presidencia.
Lo primero que Colosio tenía qué hacer, al llegar a la Presidencia, era hacer un pacto, en un pergamino virgen, con satanás, y Colosio no lo aceptó. Y se lo dijo a Carlos Salinas: “Yo no le puedo servir al diablo, porque yo he conocido a un Cristo de poder”.
Cuando Colosio se negó a servirle al diablo, Salinas se comunicó directamente al clero católico en Roma, y de allá vino la orden para matar a Colosio. Se nos había dado la orden para matar a Colosio, por medio de una bomba metálica en su carro, pero Salinas se desesperó, y le dio la orden a Mario Aburto.
La pistola que usó Mario Aburto no fue la que mató a Colosio; a Colosio lo mataron en el hospital, en Tijuana, con una inyección.
LA ESPOSA DE COLOSIO
Posteriormente se le dio muerte a la secretaria, luego a un procurador en Tijuana, y por último a la esposa de Colosio.
¿Por qué motivo? Porque la esposa de Colosio tenía las pruebas de quién había mandado matar a su esposo.
Y se fue a Roma, … … Posteriormente vino el exilio de Salinas, y nosotros seguimos trabajando con las drogas y las armas. El diablo se volvió a presentar, nuevamente, y me dijo que quería que yo asesinara a un hombre que le daba mucha guerra.
Este hombre es un siervo de Dios. Donde este hombre se para, las almas se salvan.
¿Por qué? Porque el Espíritu Santo mora en él.
Yo había regresado de un viaje de Colombia, cuando el diablo se me apareció, y me dijo que yo asesinara a este hombre.
 Al llegar a Los Ángeles, California, se me tomó preso por un instante, mas me dejaron libre por el dinero que pagué. Y me vine a México nuevamente.
YIYE ÁVILA
Y aquí fue donde el diablo me dijo:  - “Ahora es el momento de que tú liquides a ese hombre que me estorba. Cada vez que ese hombre habla de Dios, hasta los brujos que yo tengo a mi cargo se convierten, y yo quiero que lo mates”.
Como yo no creia en Cristo, todo lo que oliera a Dios yo lo odiaba.
Entonces yo le dije al diablo: “¿Dónde tengo que ir?”.
El diablo me mostró un documento; una pequeña hoja donde estaba la dirección donde tenía que ir. Y me trasladé a la ciudad de Acapulco, Guerrero México. Allí estaba este hombre, precisamente, al que yo tenía que asesinar. Grande fue mi sopresa, porque cuando llegué a la dirección que estaba escrita en el papel, me quedé sorprendido, porque a donde había ido, era a una campaña evangélica.
Yo dije: -“El diablo se volvió loco, de tanto azufre que huele. Porque me está enviando... ¡a una campaña evangelística, sabiendo que yo odio a los evangélicos!”.
Pero ahí adentro estaba el hombre que yo tenía que asesinar. Entonces me introduje a esa campaña. Cuando llegué al púlpito, ahí me encontré con un hombre de baja estatura, algo fortachón, pelo blanco. Con una mano en la Biblia, y otra hacia el cielo, decía: “Señor, cúbreme con tu Sangre preciosa”. Cuando yo me le quedé mirando, ya había abierto los ojos, y me estaba mirando. Y yo le dije:
 - “Oiga, ¿Usted es Yiye Ávila?”.
Y me dijo:
- “Sí, yo soy Yiye Ávila”.
Y yo le dije: -Bueno, esta es tu última noche, porque te vengo a matar.
Y este hombre, con toda tranquilidad, y con una sonrisa en los labios, me dijo:
 - Ya lo sabía.
Y yo dije:- “¿Cómo es posible que este hombre sepa que lo voy a matar, si vengo recorriendo kilómetros y kilómetros, para llegar hasta aquí?”.
Pero déjeme decirle que el Espíritu Santo ya le había dicho: “Revístete de mi poder, porque el diablo te viene atacar”. Entonces, cuando quise sacar el arma, no pude. Estaba yo hasta chueco, porque no podía sacar el arma. Y una fuerza me jalaba hacia afuera; así di media vuelta, y me fui.

Al llegar afuera, mi brazo daba vueltas, y volteé hacia la puerta, y lo que vi en esa puerta me dejó tan impresionado que tuve miedo por primera vez. Cuando voltee, vi a muchos hombres de blanco, y cada hombre tenía un escudo, y en la otra mano tenían unas espadas blancas; yo no comprendía eso. Hasta ahora sé, que estoy en el camino de Dios, que eran ángeles del Cielo, que guardaban a su siervo.
Como el diablo vio que yo no pude matar a Yiye Ávila, empezó a cerrarme los negocios. Y yo decía: “Voy a quedarme pobre”. Cuando empezó el diablo a cerrarme los negocios, no sabía qué hacer; me encontraba desesperado...
..Continuará… PARTE IV
Fuente revista Centinela julio /12  (disponible solo en PDF)

miércoles, 24 de octubre de 2012

TESTIMONIO DE EX NARCO MEXICANO 2 PARTE


II PARTE
Yo era ateo; yo nunca creí en ninguna imagen, en ningún cristo, en ningún dios. Porque yo decía que yo era mi único dios.  Pero déjeme decirle que La Palabra de Dios dice que nadie va al Padre si no es por Él. Posteriormente, cuando se enfrió un poco el pro- blema de “La Quina”, regresamos a México, y comenzamos a trabajar. En México se habían quedado los Arellano Félix como judiciales federales de Narcoticos, y Daniel Arizmendi, y sus hermanos, como judiciales del Estado. Llegando a México comenzamos a buscar nuevos horizontes en el dinero, en la mafia y en el control de los estupefacientes.
“EL SEÑOR DE LOS CIELOS”
Y nos fuimos a encontrar con Amado Carrillo Fuentes, “El Señor de los Cielos”. En la actualidad, la prensa y la radio dicen que Amado Carrillo está muerto, pero Amado Carrillo radica en Colombia. Nos pusimos a trabajar con Amado Carrillo durante algún tiempo, hasta que se presentó satanás, pidiéndome tributo. Yo me burlaba,
porque decía que
con darle dinero
a satanás, con
eso pagaba mi deuda, pero no sabía que el dueño del dinero de este mundo es el diablo (sic).
En la actualidad, el dueño de mi vida se llama Jesús de Nazareth.
SANGRE DE SANTOS
Cuando satanás comenzó a pedirme tributo, yo le dije:
—Bueno, ¿qué cosa es lo que quieres?
El me dijo que quería sangre.
Yo le dije:
—Sangre para qué. ¿Qué acaso los que están en el
infierno están muy anémicos?
Y él me dijo que quería sangre de santos. Yo no
comprendia la palabra “santo”, hasta ahora que es- toy en los caminos del Señor.
El me entregó una lista, con algunos nombres que tenía que ir yo a perseguir y a buscar, para entregárselos a satanás.
Estos nombres se encontraban en Puerto Rico, Venezuela, Nicaragua, Panamá, Costa Rica, Colombia, México y Estados Unidos.
Y estos nombres que estaban escritos en esta lista, era nada menos que pastores evangélicos, pentecostés.
Empezó la persecución contra pastores; yo me introducía a las iglesias, y sacaba a los pastores y los amenazaba con un arma en la mano. Pero pasaba algo grandioso en esos momentos... Porque cuando yo ponía el arma en la cabeza de los pastores, no sonaba ni un cartucho. Y me preguntaba: “¿Por qué pasa esto?”.
Deje decirle que la mano de Jehová estaba presta para salvar a sus siervos.
Eso lo he comprobado porque, ahora como cristiano, como siervo de Dios, han intentado asesinarme en dos ocasiones. Una en un templo, otra en una campaña, y la ultima fue que nos dieron veneno en la comida, a mí y a mi esposa. Pero hemos comprendido la misericordia de Dios, porque Él nos ha salvado de la muerte, y he aquí comprendo porqué esos pastores no podían morir. Porque Jehová estaba ahí, presente con ellos.
Hermano pastor, si usted se rinde completamente al Señor, si usted predica la verdad, si usted habla con la autoridad de Cristo, el diablo no lo tocará ni a usted ni a su simiente. Porque usted es un escogido del Señor.
Cuando esto sucedió, y no pude asesinar a los pastores, el diablo empezó a enviarme a las cárceles, donde fui objeto de las peores torturas que existen.
Se me tomaba preso, y se me lindaba (inaudible) en una viga, con las esposas, y comenzaban a golpearme brutalmente, hasta hacerme orinar, vomitar sangre y tirar sangre por la nariz.
TEHUACANES CON CHILE VINAGRE
Cuando me quitaban de esa viga, me sentaban en una silla, me esposaban hacia atrás, y enfrente de mí aparecían varios tehuacanes, con chile vinagre; luego me tapaban la boca con una franela, me hacían la cabeza hacia atrás, y me echaban el tehucán por las narices.
Luego me golpeaban el estómago, y cuando me retiraban la franela, era sangre lo que yo vomitaba. Las uñas de los dedos de mis pies me las arrancaban con pinzas, luego me echaban vinagre y sal,
para sacarme la verdad. Pero nunca pudieron.
La única verdad que estás escuchando la ha sacado Jesucristo, sin necesidad de torturas; solamente con su Palabra y su amor.
EN SIETE RECLUSORIOS
Fui prisionero de siete reclusorios: El primero, fue en Villahermosa, Tabasco; el segundo, en Coatazacolcos, Veracruz; el tercero, en Cerro Hueco, Chiapas; el cuarto, en Guatemala, en el centro federal; el quinto, en Houston, Texas, en un reclusorio de la DEA; el sexto, en la Ciudad de México, y el último, de donde salí para predicar el Evangelio, fue en Almoloya de Juárez.
Yo seguí narco traficando con armas, y contacté un negocio muy importante en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas: El negocio del tráfico de armas.
EL EJÉRCITO ZAPATISTA
Ahí en Chiapas me contacté con el dirigente del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), mejor conocido como subcomandante Marcos. En Chiapas, el EZLN está ahí acuartelado, pero no es para darle guerra al Gobierno. El EZLN tiene otro nombre: Sendero Luminoso. Es un ejército sudamericano que está escondido en este País, y que el clero católico lo está manteniendo, dándole alimento, incluso dándole dinero. El clero católico tiene al EZLN en su mando. En San Juan Chamula, una región de Chiapas, el EZLN cometió el crimen más atroz que usted se puede imaginar, que usted haya visto, o que usted haya escuchado. Una iglesia cristiana pentecostés, de 100 miembros, fue arrasada por el EZLN. La orden la dio Domingo Ruiz, primo hermano del subcomandante Marcos.
En la actualidad, en San Juan Chamula se vive algo tremendo. Los cristianos no pueden orar ni alabar a Dios, sino hasta en la madrugada, y en lo alto de los cerros.
SAMUEL RUIZ ES MARCOS
El verdadero subcomandante Marcos se llama Samuel Ruiz, ex-obispo de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Chiapas estuvo a punto de perderse en inundaciones, pero por la misericordia de muchos, que clamaron por la vida de los chiapanecos, Chiapas se salvó.
Y sigue la persecución. Esto significa que es principio de dolores, porque la Biblia indica que la Iglesia pasará por principios de dolores, antes del arrebatamiento.
Después de haber contactado al subcomandante Marcos, yo me fui a Estados Unidos. Y empezamos a trabajar, hasta que llegó una invitación a trabajar con Carlos Salinas de Gortari. Y nos vinimos a México, donde nos contactamos con Salinas. Salinas de Gortari comenzó a darnos órdenes, para empezar a liquidar a gente que le estorbaba dentro de su gabinete.
POSADAS OCAMPO
Pero también había alguien que le estorbaba en el clero católico: Posadas Ocampo, el sacerdote que fue asesinado en el aeropuerto de Guadalajara.
La radio y la televisión dicen que fue una equivocación el crimen de Posadas Ocampo. Déjeme decirle que Posadas Ocampo tenía nexos con el narcotráfico, y no fue ninguna equivocación.
Posadas Ocampo recibía 500 millones de pesos cada seis meses, por tres bandas de narcotraficantes. Porque él sabía la ubicación de los laboratorios clandestinos de heroína, cocaína y de morfina.Y la banda decidió liquidarlo.
continuara....
en la III parte leeremos como el diablo le ordena matar al evangelista Yiye Avila..

YIYE ÁVILA
Y aquí fue donde el diablo me dijo: “Ahora es el momento de que tú liquides a ese hombre que me estorba....
..Yo dije: “El diablo se volvió loco, de tanto azufre..
Fuente> revista centinela julio 2012